jueves, 12 de mayo de 2016

Midi Pirynees - Etapa 7: Najac - Cordes sur Ciel - Lautrec

Nos despertó una mañana nublada, se agradecía después de los dos últimos días de calor, hoy teníamos de nuevo por delante una jornada "apretada" si es que ese término se puede usar para explicar qe recorreríamos 3 nuevos pueblos de la región del MIdi.

Sin mas, y por este orden, Najac, Cordes sur Ciel y Lautrec, comenzada nuestro día.

Nos despedimos con muy buen sabor de boca de Saint Cirq La Popie, y nos dirigimos hacia Najac, los recorridos de todos estos días tienen en común que ninguno es muy  largo, además siempre escogemos el camino mas sinuoso, el menos directo, estamos viajando en furgo y huimos de todo aquello que suene a vía rápida o autopista, nos perderíamos seguro muchos de los encantos de estas comarcas.



Najac es un pueblo especial por su situación y por su distribución, como otros, se agarra a las lomas de una colina coronada por un castillo, sin embargo, parece como si uniera dos colinas y el pueblo se hubiera edificado siguiendo la cresta, le da un aspecto serpenteante muy atractivo.







Entrando al pueblo por la parte mas alta, ya se vislumbra una calle principal interminable que va seseando entre casas de piedra, que sube y baja constantemente según la orografía del terreno.



Y en cada paso, siempre el castillo al final de la calle, como remate a esta serpiente de casas. Aparecen las primeras tiendas de artesanos, bistrots y demás puestos de hostelería.






Llegamos al otro extremo del cordel y ahora estamos en el castillo, mirando hacia atrás comprobamos de nuevo la forma sinuosa del pueblo desde la otra parte de la montaña.

Encontramos algunos restaurantes con mucho encanto, ya a la ida habíamos echado el ojo a uno de ellos que tenía un patio exterior colgando de unas paredes llenas de plantas y con unas preciosas vistas del valle y del castillos.

Se echaba la hora de la comida encima y decidimos cambiar de planes y probar suerte este coqueto bistrot.



Tras la comida, muy rica y aun precio mas que razonable, no dirigimos hacia Cordel sur Ciel, en un principio, tenía la intención de pernoctar en este pueblo, es conocido y de ahí su nombre, que por las mañanas al amanecer un mar de nubes cubre el valle y por el asoma en lo alto de la colina este precioso pueblo.



Sin embargo decidí adelantar camino y llegar al que sería nuestro último pueblo del Midi en este viaje, Lautrec.



Cordel sur Ciel es un pueblo casi exclusivamente de artesanos, muy bohemio y con rasgos artísticos a cada paso.

Puedes encontrar una exposición de lo que sea en cualquier lugar, por supuesto en la propia calle también.





Me sorprendió mucho la cantidad de tiendas que a su vez vendían productos para otros artesanos y artista, por ejemplo tiendas que solo vendían tintes.




Y a media tarde llegamos a Lautrec, aquí tenía controlada una AC para pernoctar de lo mas recomendable, cuando llegamos ya habían aparcado unas 5 autocaravanas. Disponía de un arroyo, instalaciones de baño perfectas, un lugar idóneo donde pasar la noche.

Además al pueblo se iba paseando atravesando unos cultivos por un pequeño sendero, así que dicho y hecho, instalados por fin, nos dirigimos hacia Lautrec.



Lautrec es conocida por ser la cuna de la familia con el mismo nombre, su miembro mas conocido sin duda es el pintor Toulouse Lautrec. Pero además es un pueblo que tiene hoy en día uno de los pocos molinos en funcionamiento.




El molino en lo alto y el pueblo tras el representa una de las imágenes mas características de esta población.


Encontramos dos cosas que nos llamaron la atención y ambas por pura casualidad, fuimos siguiendo durante un buen rato el sonido de una música de violín que sonaba a lo lejos, tras recorrer diversas callejuelas llegamos a un local abierto de par en par y lleno de asientos de cualquier manera, la gente disfrutaba en esa especie de terraza del buen ambiente y la música en directo.

También encontramos en las calles de Lautrec una exposición de fotografías del NG, colocadas de forma estratégica en algunos de los rincones mas llamativos y perfectamente fusionadas con el propio entorno.



La luna ya salió y el sol comenzaba a esconderse, todavía nos quedaría un último pueblo por visitar a la mañana siguiente, ya algo mas alejado que los visitados estos días anteriores. El último rayo se despidió de nosotros justo cuando llegábamos de nuevo al AC, ahora a preparar la cena y a descansar, dulces sueños.



continuará ...

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