Mañana y tarde

Hay momentos en que la necesidad que habitualmente tengo de tener contacto con la naturaleza se hace mayor, quizás para respirar aire puro, quizás para que la mente se recomponga del devenir diario, para intentar ordenar ideas, para intentar comprender lo que no comprendemos, o simplemente para no pensar.

Cuando eso ocurre, es cuando valoro realmente la suerte que para mi representa vivir en un entorno como este.

Así que sin pensarlo mas, quede con unos amigos para hacer una visita a la Barranca, un valle estrecho y sombrio que descansa a las faldas de la Maliciosa y la bola del Mundo (Alto Guarramillas), por el que transcurre el río de montaña Samburiel y que trás dejar atrás dos preciosas presas termina en el embalse de Navacerrada.

La idea era aprovechar las bajas temperaturas de estos días y la previsión de nieve para hacer detalles de hielo, la zona es muy productiva para este tipo de fotografía, pero las previsiones no se cumplieron ya que no encontramos apenas hielo, así que nos conformamos con el paseo, las vistas y el disfrute de ver pasar las nubes a gran velocidad por la cima de la Maliciosa...

Por la tarde, el día seguía siendo bonito en la Sierra, había posibilidades de tener un atardecer hermoso, así que subí, esta vez a un sitio mas cercano aún, el embalse de la Jarosa, y durante un buen rato gozar de los cambios de luz tan fugaces cuando el día es tan cambiante.

A medida que había menos luz, el cielo alcanzaba un aspecto mas "dramático", así que probé un virado para esta imagen entre las hierbas secas de la orilla.

Despúes de estos ratos en el campo, donde el frío en la cara te hace revivir, donde aprecias lo pequeño que somos en comparación con la montaña o con los ríos o lagos o con un atardecer, te sientes mejor, si tenemos problemas, seguiran estando ahí, pero encontrarás la fuerza para afrontarlos, y sobre todo aprendes que al igual que no controlamos el viento, las nubes, el sol, la lluvia, tampoco lo hacemos con todo lo que nos puede afectar desde fuera, sencillamente porque no esta en nuestra mano.

Besos