Si cabe, cuando se trata de una inmersión nocturna ese mundo resulta todavía mas fascinante.
En esta ocasión entramos desde Playa Chica (Lanzarote) cuando la noche ya había caído sobre nosotros, aunque íbamos a disfrutar de una estupenda luna llena en todo el recorrido que comienza con un manto de anémonas en la arena.
A mi particularmente me gusta ir con muy poca luz de apoyo, una pequeña linterna sujeta a uno de los brazos de la carcasa es mi única fuente de luz, pero como digo, prefiero ir a oscuras y solo ver allá donde apunto, comienza el paseo y estoy totalmente relajado.
Por la noche la fauna varía con respecto al día, principalmente se ve actividad de animales que durante el día no se muestran y al contrario, aparece fauna nocturna como gambitas, estrellas, erizos etc etc.
Es fácil ver a algunos peces acostados sobre lechos de algas o en pequeños recobecos, como ocurre con esta gallineta tan simpática o este pequeño cangrejo araña.
Enterrados en la arena encontramos sepias, peces sapo, pez lagarto, esperando pacientemente poder capturar alguna presa.
Una vez terminada la inmersión, las caras de todos los buzos muestran una inevitable sonrisa.
Besos silenciosos
Se siente el silencio. Es también inevitable esa sonrisa cuando vemos tus fotos.
ResponderEliminarBesos,
Lola.
Tal y como lo has contado y con las fotos me he sumergido en el fondo del mar contigo y además me ha encantado la experiencia.
ResponderEliminarBesos
El ojo que todo lo ve, eres como el oráculo.Besos
ResponderEliminarmuy originales las fotos nocturnas bajo el agua...ya nos enseñaras mas de tu viaje....
ResponderEliminarun abrazo